Será a primeros del próximo mes cuando Adobe lance, en el marco de la conferencia para desarrolladores Max, Flash Player 11, con el que quiere demostrar que Flash sigue siendo relevante y que la compañía sigue invirtiendo en él.
Flash cuenta con una gran base de desarrolladores, y su plug-in está instalado en el 98% de todos los navegadores web. Está claro que no es la única manera de escribir aplicaciones (ahí está HTML5), pero es igualmente cierto que Adobe no va a abandonar su cuota de mercado.
Una de las principales características de Flash 11 es Molehill, un interfaz para gráficos 2D y 3D acelerados por hardware. Probablemente no hará cambiar de idea a los que quieren ver a Flash fuera de la web, pero será bien recibido por los creadores de juegos. Con capacidad para animar millones de objetos con un refresco de pantalla de 50 frames por segundo, los usuarios pueden esperar juegos con calidad similar a los vistos en una Xbox o PS3, pero en un navegador web, aseguran desde la compañía.
En el caso de que las aplicaciones Flash no puedan funcionar porque el plug-in está prohibido o simplemente no está instalado, se podrá contar con AIR 3, que permitirá que las aplicaciones Flash se empaqueten como aplicaciones únicas.
También nuevo es el soporte para 64-bits, que ayuda a Flash a mantener la compatibilidad con los navegadores que funcionan con procesadores más modernos.
En Flash 11 Adobe se ha centrado en tres áreas principales, áreas de gran crecimiento, como son juegos, vídeo online y aplicaciones orientadas a los datos, que son aquellas capaces de proporcionar un aspecto ameno a la información almacenada en las bases de datos dondequiera que estén.
A pesar de las mejoras de Flash 11, Adobe se enfrenta a grandes retos, el último Windows 8, cuyo interfaz Metro es capaz de ejecutar aplicaciones web y cuya herramienta para desarrolladores ha sido muy apreciada.
Google, por el contrario, parece haberse convertido en el gran aliado de Adobe, ayudándole a adaptar Flash para los terminales basados en Android e incorporándole en su navegador Flash. Pero iOS es un sistema operativo clave actualmente y Windows 8 lo será en un futuro cercano, y ambas compañías tienen un montón de desarrolladores detrás suyo.