Intel fabricará chips para móviles
Intel, el primer fabricante de semiconductores del mundo, fabricará chips ARM para terceros, por lo que el próximo procesador de smartphones de Apple, Motorola o LG podría salir de sus plantas. Durante su presentación en el Congreso Mundial de Desarrolladores en San Francisco, Intel ha anunciado un acuerdo con la compañía ARM Holdings (en inglés) para licenciar los chips empleados por buena parte de celulares y tabletas actuales.
A partir de ahora, Intel podría empezar a fabricar procesadores ARM empleando la tecnología de 10 nanómetros —el número se refiere al tamaño de los transistores en el chip—, tan avanzada que pocas marcas tienen la capacidad de elaborar ese tipo de microprocesadores. Por ejemplo, compañías como Apple o Qualcomm recurren a Samsung o TSMC para que se los produzcan.
La llegada de los smartphones disparó la demanda de este tipo de chips, mientras que Intel había abandonado ese mercado con la venta de XScale en 2006. Por ello, este acuerdo supone un gran paso para la compañía de Santa Clara, que se posiciona en un lugar privilegiado frente a otras marcas. Las primeros teléfonos con procesadores ARM de Intel podrían salir en 2017.
IBM busca reemplazar los microprocesadores de silicio con carbono
La empresa estadounidense de tecnología IBM ha descubierto un método para la fabricación de transistores con nanotubos de carbono que podrían permitir el desarrollo de microprocesadores mucho más diminutos que los que existen ahora y reemplazar a los actuales «chips» de silicio.
Según documenta un artículo publicado hoy en la revista Science, los investigadores de IBM han descubierto un método para transportar electrones en un nanotubo de carbono, una estructura 10.000 veces más pequeña que un cabello humano y gran conductora de electricidad.
IBM señaló en un comunicado que el descubrimiento abre la puerta a microprocesadores cuya rapidez aumenta «de forma drástica» y que son más pequeños y potentes que los microprocesadores tradicionales.
Los científicos de IBM han logrado vincular un metal a un nanotubo de carbono para facilitar así la conducción de electrones a través del nanotubo sin dañar el desempeño del microprocesador.
El hallazgo podría permitir, eventualmente, que los investigadores reemplacen los transistores de silicio con los nanotubos de carbono.
El anuncio abre las puertas para que los fabricantes de microprocesadores fabriquen transistores de 3 nanómetros, frente a los entre 11 y 14 nanómetros de los microprocesadores más avanzados en la actualidad.
Cada nueva generación de «chips» se define, precisamente, por el tamaño mínimo de esos componentes esenciales.
IBM anunció en julio pasado que había desarrollado un nuevo microprocesador de 7 nanómetros cuatro veces más potente que los actuales y capaz de albergar 20.000 millones de transistores en un artefacto del tamaño de una uña.
Los transistores de esos nuevos «chips», desarrollados en un laboratorio de Nueva York, están todavía en fase de prototipo.
Esos transistores son el equivalente en la informática a las neuronas cerebrales y hacen posible que los ordenadores realicen, en poco tiempo, tareas y cálculos enormemente complejos.
Su invención hace alrededor de medio siglo por John Bardeen, Walter Brattain y William Shockley revolucionó la informática e hizo posible que los ordenadores, las cámaras fotográficas, los teléfonos y los reproductores musicales estén condensados ahora en un solo dispositivo: el teléfono inteligente.
Ese avance imparable del poder computacional ha permitido desarrollar una generación de teléfonos inteligentes más potentes que el ordenador que puso al hombre en la Luna en julio de 1969 y confirma la validez de la conocida como «Ley de Moore».
Gordon Moore fue uno de los cofundadores de Intel, la mayor empresa de microprocesadores del mundo, y predijo, en 1965, que la cifra de diminutos interruptores eléctricos en cada «chip», los transistores, se duplicaría alrededor de cada dos años.
Su pronóstico resultó ser certero, aunque los desafíos planteados por la producción de unos microprocesadores cada vez más minúsculos llevó a algunos ingenieros a pronosticar que la Ley de Moore dejaría de cumplirse en esta década.
Los últimos descubrimientos de IBM han dejado sin validez a esos vaticinios y permiten augurar que el avance exponencial de la tecnología continuará en los próximos años.
Intel sorprende en el CES y lanza un PC del tamaño de una tarjeta SD que corre con Linux
ntel presentó Edison, un computador miniatura completo del tamaño de una tarjeta SD. Está basado sobre la tecnología de 22nm de la compañía, viene con WiFi y Bluetooth incluido y corre Linux. Incluso cuenta con una tienda de aplicaciones.
El dispositivo está enfocado a desarrolladores, e Intel espera que sea utilizado para crear dispositivos vestibles. La compañía mostró a modo de ejemplo una colección de productos para bebés que están usando chips Edison: una tortuga que alerta sobre los signos vitales del niño a los padres a través de una taza de café, un calentador de leche que comienza a funcionar cuando la tortuga escucha llorar al bebé, etc.
Como los ejemplos no bastan, Intel también lanzó una competencia con jugosos premios para motivar a los desarrolladores a usar Edison. El concurso «Make it Wearable» ofrecerá hasta USD$1,3 millones en premios para quienes creen dispositivos vestibles. No se han revelado los detalles de la competencia todavía, pero el CEO de Intel, Brian Krzanich, aseguró que el primer lugar se llevaría USD$500.000.
Los Edison saldrán a la venta a mediados de 2014, así que el concurso ocurrirá después de eso.
fuente.fayerwayer
El Grafeno de la computación clásica a la cuántica
La ley de Moore quedará obsoleta en 10 años más. La computación cuántica aún está en pañales, por lo que una crisis es inevitable, a menos que la transición comandada por el grafeno se haga efectiva.
La computación cuántica permitirá procesar en segundos volúmenes de información que actualmente tardaría siglos, pero no será la siguiente generación informática.
Los avances en esta materia han sido significativos, pero aún está estancada por el poco entendimiento del mundo cuántico, donde las partículas pueden estar en dos lugares a la vez, y solo con mirarlas cambiamos su estado, lo que impide su estudio. Lo que necesitamos (como humanidad, y aun más como geeks) es una etapa de transición entre la computación actual y la computación cuántica.
Es aquí donde se genera la crisis. Si la computación cuántica no llega pronto, y la tecnología continua a los ritmos actuales de innovación, de aquí a 10 años ya no se podrá construir procesadores más rápidos, porque no se podrán construir transistores más pequeños.
El transistor, en palabras simples, es el elemento básico de la electrónica. Es como los ladrillos de un edificio, la unidad fundamental. Su función es permitir o bloquear el paso de corriente eléctrica por un lugar determinado, lo que se puede traducir en: abierto o cerrado, blanco o negro, encendido o apagado, y lo que nos convoca, 0 ó 1 (bit).
Existen 3 requerimientos básicos para seguir desarrollando nuevos procesadores (la base de nuestra tecnología):
- Incluir más transistores en un mismo espacio.
- Incluir transistores cada vez más rápidos.
- Que sean viables económicamente.
Lo repito, de continuar al ritmo actual de innovación, en 10 años más no podremos cumplir ninguno de los 3 requisitos.
Entonces, ¿Quién podrá defendernos?
La respuesta proviene del supermaterial que ganó el premio Nobel de física del 2010: El grafeno. Compuesto por hojas de carbono de un átomo de espesor, el grafeno posee características de dureza, flexibilidad y conductividad eléctrica con las cuales cambiará muchos aspectos de nuestra vida: La electrónica, la construcción, el camuflaje militar y probablemente la tecnología en general.
La ventaja específica que provee el grafeno es que su conductividad eléctrica permite crear transistores mucho más rápidos utilizando el menos espacio que los actuales. El problema es que resulta muy complejo crear transistores de grafeno, dado que es tan pequeño que cuesta mucho permitir los estados de encendido y apagado (o y 1), o eso era hasta ahora.
Científicos de la Universidad de Stanford utilizaron ADN para crean nanocables de grafeno, con los cuales desarrollaron transistores.
Estos transistores de grafeno tendrían un átomo de espesor, y entre 20 a 50 átomos de largo. Con ellos se podrían desarrollar procesadores mucho más rápidos que los actuales con menor consumo energético.
“Demostramos por primera vez que se puede usar ADN para desarrollar nanocables y luego hacer transistores funcionales” dijo Anatoliy Sokolov, co-autor del proyecto. “Nuestro método de fabricación basado en ADN es altamente escalable, y ofrece bajos costos de manufactura. Todas estas ventajas lo hacen muy atractivo para la adopción de la industria”.
Cómo los crearon
Primero los científicos utilizaron silicio (como sustrato) para el transistor experimental. Sumergieron el silicio en una solución de ADN para formar cadenas en línea recta.
Posteriormente, estas cadenas de ADN fueron sometidas a un proceso químico para que absorbieran iones. Luego, la solución completa fue calentada junto con gas metano (que posee carbono). El calor liberó átomos de carbono, los cuales fueron atraídos por las cadenas de ADN, formándose así un cable de grafeno. Estos nanocables fueron utilizados para crear un transistor, el que funcionó correctamente.
Pese a que no es la primera innovación tecnológica que utiliza ADN como material de construcción, no puedo dejar de sorprenderme por el ingenio de aquellos que están construyendo nuestro futuro. Si esta nanotecnología es bien recibida por el mercado, podremos esperar la computación cuántica tranquilos y con los brazos abiertos.
Link: Extremetech
Científicos crean un transistor de un sólo átomo
Un grupo de investigadores de la Universidad de New South Wales creó un transistor de un sólo átomo de fósforo, que podría abrir el camino a electrónicos todavía más pequeños que los que tenemos hoy. Aunque los transistores de un solo átomo habían sido creados anteriormente en laboratorios, no se había podido replicar su funcionamiento, ni hacerlos funcionar de forma regular. Este es el primero que se podría producir de forma confiable, lo que marcaría un paso importante en el desarrollo computacional.
Un transistor es básicamente una pieza de material semiconductor que está entremedio de dos electrodos, y que actúa de forma similar a un switch. Un pulso eléctrico dado por un tercer electrodo permite “abrir” el switch, dejando que la corriente fluya a través del transistor, o lo cierra, interrumpiendo la corriente.
Combinar los transistores en un chip produce circuitos lógicos que pueden computar. Una de las metas de los fabricantes de chips es crear transistores cada vez más pequeños, de modo que un chip pueda tener muchos y aumentar su poder de computación.
Para lograr la hazaña, los investigadores cubrieron una lámina de silicio con hidrógeno, retirando luego átomos del gas siguiendo un patrón específico. Expusieron dos líneas y un pequeño rectángulo de sólo seis átomos. La placa fue luego cubierta con fosfeno, que sólo se adhiere a los lugares donde los átomos de hidrógeno habían sido retirados. Así, se obtuvieron electrodos de fósforo y un transistor de un sólo átomo, que se posicionó en el rectángulo pequeño.
Los electrodos estaban a 108 nanómetros de distancia. Crear un voltaje entre ellos permitió que fluyera una corriente entre dos electrodos perpendiculares (a 20 nanómetros de distancia), con el átomo de fósforo actuando como transistor.
Los investigadores creen que este método para construir transistores es el futuro de los circuitos más poderosos, que no se logrará con los métodos actuales. Sin embargo, la fabricación de este sistema es altamente compleja, por lo que probablemente no lo veremos funcionando hasta varios años más. Como sea, hasta hace poco se consideraba que este logro no se vería hasta 2020, así que al menos el trabajo va adelantado.
fuente.fayerwayer
Zilog Z80, un procesador multiusos
El Intel 4004 fue el primer microprocesador de la historia y, tras éste, Intel desarrolló otro procesador más del que también se encargó Federico Faggin, responsable del Intel 4004, al que se le encargó el desarrollo de un procesador de 8 bits, el Intel 8080 que también gozó de un gran éxito en el mercado. Al finalizar este proyecto en 1974, Faggin pensó que era hora de volar en solitario y afrontar nuevos proyectos y decidió fundar su propia compañía, Zilog, en la que se desarrollaría otro mítico procesador: el Zilog Z80.

Zilog-Z80
ZiLOG Inc. o Zilog, se fundó en California y Federico Faggin, además de ser el fundador, asumió el cargo de Presidente y CEO de la compañía. Con el know-how que poseía gracias al liderazgo de los proyectos del Intel 4004 y el Intel 8080 y su experiencia previa en Fairchild Semiconductors, Faggin decidió afrontar el desarrollo de un nuevo procesador que, desde el punto de vista práctico, fuese totalmente compatible con el Intel 8080 pero que, en prestaciones, fuese mejor.
Tras dos años de trabajo, en los que Faggin diseñó la arquitectura del procesador y supervisó la fabricación, el Zilog Z80 fue lanzado al mercado en julio de 1976 ofertándose a un precio más barato que el Intel 8080 y ofreciendo total compatibilidad con el 8080 por lo que las aplicaciones desarrolladas para el procesador de Intel podían ejecutarse en el Z80 (incluyendo el sistema operativo CP/M). Si bien el Z80 era compatible con el Intel 8080, el procesador diseñado por Faggin en su compañía presentaba algunas mejoras que hacían que el Z80 se considerase una ampliación del modelo de Intel, como por ejemplo un sistema de instrucciones ampliado, la inclusión de un par de nuevos registros o la simplificación de los dispositivos auxiliares necesarios para su funcionamiento (reloj, memoria, etc).
Con mayores prestaciones y menor precio, el Z80 llegó con bastante fuerza al mercado y despertó el interés de muchos fabricantes que integraban circuitos electrónicos de terceros; de hecho, el Z80 barrió al Intel 8080 del mercado y se convirtió en un procesador muy popular y utilizado gracias a una gira de presentación realizada por Faggin a potenciales empresas cliente.
El Zilog Z80 ha estado presente en dispositivos muy conocidos como el mítico Sinclair ZX Spectrum, un ordenador personal de 8 bits que llevaba en su interior un Zilog Z80A a 3,5 MHz y que fue muy popular en los años 80. También formó parte de uno de los primeros ordenadores portátiles de la historia, el Osborne 1 (1981) y en los ordenadores de corte empresarial Amstrad CPC y Amstrad PCW. Gracias a su compatibilidad con el sistema operativo CP/M, otros fabricantes que no utilizaban este sistema operativo pero eran conscientes de la popularidad del mismo decidieron lanzar al mercado tarjetas de expansión para sus computadoras para que pudiesen ejecutar CP/M y, claro está, estas tarjetas llevaban un procesador Z80 y se lanzaron para el Apple II y el Commodore 64.
El mundo de los videojuegos también se apoyó en el Zilog Z80 como componente de consolas y máquinas recreativas. Las consolas de Sega Master System y Game Gear también utilizaban como CPU un Z80, la Neo-Geo y la Sega Mega Drive llevaban un procesador Z80 para el procesado de audio y el arcade de Pac-Man también llevaba un Z80 en su placa base.
Tanta versatilidad y tanta extensión en uso provocó que otros fabricantes, por medio de la ingeniería inversa, también fabricasen sus versiones clónicas del Z80. Para la consola portátil GameBoy de Nintendo, Sharp fabricó un clon del Z80 que funcionaba a 4,1 MHz y no sería el único fabricante puesto que NEC y National Semiconductor también lanzarían sus propias versiones. Al otro lado del telón de acero también llegó el Z80 y también se desarrollaron clones tanto en la República Democrática de Alemania (RDA) como en la Unión Soviética (cuyo código VHDL está disponible y se puede utilizar en una FPGA para sustituir un Z80).
Hoy en día, el Z80 se sigue utilizando, en una de sus últimas evoluciones (el Zilog eZ80) como microprocesador de algunas calculadoras gráficas y como microprocesador de algunos sistemas embebidos, lo cual da una idea de su versatilidad si tenemos en cuenta que se lanzó al mercado en 1976.
fuente.alt1040
Intel compra patentes y tecnología de vídeo a Real Networks
Intel quiere potenciar las capacidades multimedia de sus chips y ha comprador software de vídeo y patentes a Real Networks en un acuerdo valorado en 120 millones de dólares y que incluye 190 patentes, 170 patentes de aplicaciones y software de codificación de vídeo de próxima generación.
Este acuerdo permitirá a Intel ampliar las capacidades de sus procesadores, particularmente los que están diseñados para dispositivos móviles como tablets, smartphones e incluso ultrabooks.
La estrategia de Intel es ir más allá de fabricar procesadores para crear SoCs (System on a chip) que ofrezcan de todo, desde capacidades multimedia de alta definición, a opciones de seguridad, para lo que Intel compró McAfee hace un año por 7.680 millones de dólares.
El primer SoC de la compañía tienen como nombre en clave Medfield y pertenece a la familia de procesadores Atom de la compañía. Podrá vérsele en smartphones y tablets este año, un segmento de mercado en el que Intel no tiene apenas presencia y que está dominado por la británica ARM, que diseña procesadores que después fabrican Qualcomm, Nvidia, Samsung o Texas Instruments.
Intel, además, está incrementando las capacidades gráficas de sus procesadores Core para ordenadores de sobremesa y portátiles. En este sentido los próximos chips Ivy Bridge de 22 nanómetros de la compañía será los primeros que soporte la tecnología gráfica DirectX 11 de Microsoft, algo que AMD ya ofrece en su familia de APUs, o unidades de procesamiento acelerado, que integran CPU y GPU en la misma pieza de silicio.
Los Ivy Bridges también funcionarán en ultrabooks, portátiles muy finos y ligeros que empiezan a llegar al mercado y que se caracterizan por tener un encendido instantáneo, larga vida de batería, grosor de milímetros y a veces pantallas táctiles.
Volviendo al acuerdo de compra de activos de RealNetworks, esta última mantendrá ciertos derechos de uso de las patentes en productos actuales y futuros.
fuente.itespresso
Intel compra QLogic para multiplicar la velocidad de los superordenadores
Intel ha anunciado la compra de algunos activos a al proveedor de centros de datos y soluciones de almacenamiento QLogic. La firma ha acordado pagar 125 millones de dólares en efectivo (96 millones de euros) por su negocio InfiniBand.
Gracias a los activos de QLogic Intel espera “mejorar su portafolio de equipos de red y proporcionar tecnología de computación escalable de alto rendimiento (HPC)”. Para 2018, la empresa americana ha previsto una mejora en el rendimiento de las arquitecturas exaFLOP llegando a un quintillón de operaciones por segundo. Eso supondría que los superordenadores de dentro de seis años serían 100 veces más rápidos que los actuales.
La tecnología también posibilitará a Intel mejorar sus operaciones de centros de datos. Este negocio de Intel ha aumentado su facturación un 17% en 2011 y superado los 10.000 millones de dólares por primera vez.
El fabricante de chips espera cerrar la compra al finalizar el primer trimestre del año, probablemente en abril. Intel espera que gran parte de la plantilla asociada con la empresa comprada acepte ofertas para incorporarse a su fuerza de trabajo.
En cuanto a QLogic, deshacerse de este negocio le permitirá concentrarse en sus otros productos de red e interconectados.
fuente.itespresso
Desarrollan chip para transmisión inalámbrica de datos de hasta 30Gbps
Uno de los problemas de las conexiones inalámbricas, son que la velocidad de transmisión de datos no son muy altas. Pero en un experimento en el país del sol naciente, Japón, han desarrollado un chip capaz de resolver esto.
Éste ha alcanzado velocidades de transmisión inalámbrica de 1,5 Gbps. Y aseguran que incluso podrán llegar a la asombrosa velocidad de 30Gbps en un futuro, lo cual, por supuesto, aún no se ha probado en experimentos.
El dispositivo sería muy pequeño, midiendo la antena de microondas tan solo 2 cm de largo, y 1 de alto. Usa ondas de terahertz.
Esta tecnología se ha desarrollado por parte de la fabricante japonesa llamada ROHM, junto a investigadores de la Universidad de Osaka.
El costo de estos nuevos transmisores serían mucho menor que los actuales. En cuanto al tamaño también hay una reducción muy importante, los actuales son de alrededor de 20 cm cuadrados.
Se planea comenzar su producción y venta para dentro de 4 años, por lo que aún tenemos mucho tiempo por esperar, y saber si en verdad esta nueva tecnología funciona como mencionan.
Para entender esto un poco, la tecnología que actualmente conocemos (y dependiendo de donde vivamos) tenemos 3G-4G y LTE las cuales tienen un techo máximo de velocidad de 300 Mbps.
Aunque el tamaño del chip que se está probando actualmente es muy grande como para incluirlo en un smartphone, se puede ir considerando su inclusión en portátiles, y puntos de acceso, ya que en nuestros días la velocidad de las conexiones son muy importantes para la productividad.
Entonces viendo esto, y sabiendo que ya se ha alcanzado 1,5 Gbps, solo con eso ya supera en 5 veces la velocidad LTE, ademas considerando que la producción comenzara después de cuatro años, para ese entonces las tecnologías de cuarta generación no serán suficiente para nosotros.
Visto en TechCrunch, fuente bitsclouds
Investigadores del MIT diseñaron un MicroProcesador que simula ser como el Cerebro
Centíficos se acercan al sueño de crear sistemas informáticos que pueden simular el cerebro.
Investigadores del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT, por sus siglas en inglés) diseñaron un chip de computadora que imita la forma en que las neuronas cerebrales se adaptan y reaccionan ante nueva información y nuevos estímulos.
Chips de ese tipo podrían eventualmente ayudar a la comunicación entre partes corporales creadas artificialmente y el cerebro.
De acuerdo con expertos, también podría allanar el camino para la fabricación de dispositivos basados en la inteligencia artificial.
Existen alrededor de 100.000 millones de neuronas en el cerebro, cada una de las cuales forma sinapsis con muchas otras neuronas.
Las sinapsis son conexiones entre neuronas que permiten que la información fluya en el cerebro.
El proceso es conocido como plasticidad neuronal y se cree que es el sustento de muchas de las funciones del cerebro, tales como el aprendizaje y la memoria.
El equipo del MIT, dirigido por el científico Chi Sang Poon, diseñó un chip de computadora que puede simular la actividad de una sinapsis cerebral, la cual depende de los llamados canales de iones que controlan el flujo de átomos cargados como el sodio, el potasio y el calcio.
El «chip cerebral» tiene alrededor de 400 transistores que buscan imitar el circuito del cerebro.
La corriente fluye a través de los transistores de la misma manera que los iones se movilizan por los canales de iones en una célula cerebral.
«Nosotros podemos modificar los parámetros del circuito para que coincidan con los canales de iones específicos. Ahora tenemos una forma de capturar cada proceso de intercambio de iones que se produce en una neurona», indicó Poon.
Un grupo de neurobiólogos se mostró impresionado.
Esto representa «un avance importante en los esfuerzos por incorporar lo que conocemos sobre la biología de las neuronas y la plasticidad sináptica en chips», señaló Dean Buonomano, un profesor neurobiología de la Universidad de California.
«El nivel de realismo biológico es impresionante», añadió.
El equipo de investigadores planea usar el chip para construir sistemas que modelen funciones neuronales específicas, como los procesos visuales.
Dichos sistemas podrían ser mucho más rápidos que las computadoras, que tardan horas o incluso horas para simular un circuito cerebral.
El chip podría llegar a ser más rápido que el mismo proceso biológico.
fuente.bbcmundo